Debo reconocerlo, siento debilidad por los testigos de jehová. Cada vez que me tocan el timbre y veo esas inconfundibles siluetas (Los hombres se visten como mormmones desaseados y las mujeres como secretarias con poco vuelo) me salgo de la vaina. Simpre me citan el mismo pasaje del apocalipsis ese que dice que vamos todos a pasarla bien...después.
Los dejo hablar, les pregunto cosas, los saco del libreto y cuando ya están muy lejos de la idea original ¡Zas! estocada al corazón.
Hoy, por ejemplo, me negaron la evolución. Me sugirireron que "errar es humano" y que tal vez Darwin se había equivocado.
Gracias Dios por los testigos de Jehová. Ese grupo humano laborioso como hormiguero en primavera, esos que jehovan y jehovienen en una eterna conscripción de socios.
¿Cómo será tener fé?
Hoy me siento: Una de las monjitas del 2cv
miércoles, junio 02, 2004
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